Seguimos la semana saliendo casi cada día, rutas cortas pero todos los días.
Hoy además con Carolina. Hemos llegado a Criptana y variado la subida a la ermita de San Isidro por la subida a la ermita de La Virgen de Criptana.
Para la ida hemos empezado fuertes y al llegar a Criptana Belén llegó un poco fundida.
A Carolina era la primera vez que la veía con los pedales automáticas pero ya luce los arañazos de las primeras caídas, ya ha tenido las tres o cuatro primeras tontas en parado y una algo más fuerte.
Creo que es imposible aprender a montar con los pedales automáticos y no caerse. Al principio los odias, no entiendes porqué otros ciclistas hacen la tontería de ir con los pies atados a unos pedales pequeños pero cuando has aprendido es algo imprescindible. La mitad de las rutas que hago ahora no sería capaz de hacerlas sin ellos, o me costaría el doble.
Cuando íbamos a parar procuraba avisarla para recordarla que se desenganchara pero creo que ya los empieza a tener dominados, otras cuatro o cinco caídas más y lo supera, es algo inevitable.
Ninguna de las dos había estado nunca antes aquí bebimos un poco de agua y de regreso a Alcázar, ahora ya cuesta abajo y con las fuerzas que da el regreso.
Belén se había recuperado del cansancio y Carolina había llegado muy bien con sus pedales, rápido y sin caerse.
Espero que llegue el fin de semana y pueda hacer una ruta de muchos más kilómetros, el viernes me iba a ir a Madrid por la tarde yo solo pero saliendo a las 15:00h. me podía dar un soponcio y llegaría de noche y con luces por un camino nuevo, y tengo cosas que hacer por aquí así que lo dejaré para otra ocasión.
Saldré por aquí en fin de semana intentando hacer algo metiendo distancia y/o metros.
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