Más entrenamientos para Belén y pruebas para Países Bajos.

Seguimos con los entrenamientos diarios con la bicicleta, y además día a día Belén va notando que va mucho mejor.

Cada ruta la hacemos dos o tres veces antes de cambiar a otra y así además de para entrenar ahora la sirve a Belén para ir aprendiendo rutas de entre una y dos horas para poder hacer en otras ocasiones.

Los molinos de Alcázar se los sube perfectamente y ya es una cosa normal que si se pasa por la lado de la subida hay que llegar arriba y no bordearlos, incluso si se tercia y se va bien de tiempo se suben dos veces.

Lo que vamos notando es que los días van oscureciendo antes, todavía en julio y ya se nota un montón que oscure por lo menos calculo que media hora o más antes que a mediados de junio.

Para las "vacaciones-ciclistas" en los Países Bajos me llevaré la cámara de fotos compacta además de la gopro para poder hacer fotos en cualquier condición de luz, además de para ver las fotos y asegurarme que salen.

Hoy miércoles hemos decidido hacer una prueba sobre la ropa que vamos a llevar a los Países Bajos.

Tenemos muchas dudas en muchas cosas del viaje y una de estas dudas es la ropa.

Ayer que no salimos puse el transportín en las bicis y hoy las alforjas, y hemos querido salir y saldremos otras dos veces si nos da tiempo para ver que sensaciones tenemos.

Mi soporte y alforjas las he puesto un par de veces, pero a Belén nunca se lo he puesto, en el primer viaje a Santiago llevaba la otra bici de paseo y en el segundo eran solo los últimos 70 kilómetros y fue sin alforjas, llevando yo el peso y cosas de los dos.

Gracias a hacer estas pruebas con tiempo hemos descubierto que tengo que modificar los anclajes de su bici para que no choque los talones de los pies en las alforjas.

Hay cosas que ya las tenemos claras, otras que no están planificadas por no tener más tiempo y luego están las cosas que no podemos resolver o decidir hasta que no estemos allí, y esto es por que dependiendo de lo que pase un día debemos de hacer otro. Y el primer día va a ser clave.

Como decía tenemos tantas dudas que una de ellas incluye hasta la ropa que vamos a llevar, cantidad y tipo. No tenemos nada claro si ir con ropa ciclista o con ropa normal. Por esto hoy hemos realizado 40 kilómetros con ropa de calle, sin badana, sin casco, con peso, etc. y las sensaciones han sido buenas.

Lo primero que me ha sorprendido es lo que pesa la bicicleta, tengo un transportín de hierro muy fuerte pero también muy pesado y antes de poner nada, ni las alforjas vacías ya he notado que la bici pesaba un montón, luego con las alforjas con solo dos sacos de dormir y una tienda de campaña super ligera, pero luego poco a poco durante el camino hemos ido llenando y llenando y he llegado a casa con un peso en las alforjas de 19 kilos y Belén otros 10 kilos que hemos pesado en la báscula, además de lo que no he pesado como la bolsa delantera, el propio transportín y algún accesorio que he puesto a la bici como un timbre. Hoy he hecho los 40 kilómetros con unos 25 kilos más que cualquier otro día.

Pues aun esto se nos ha dado fenomenal, hemos sacado una buena media y lo mejor es que la hemos mantenido hasta el final.

Hemos empezado con un fuerte viento en contra y con amenaza de lluvia, al fondo sobre Tomelloso o Arenales se veían nubes negras y relámpagos pero aún eso hemos decidido no dar la vuelta y seguir hasta Alameda, eso si, después de llegar los alrededor de 25 kilos extras y como llegábamos tarde a casa hemos decidido saltarnos la subida a los molinos de Alcázar.

Respecto a la ropa seguimos con dudas, en un principio para pasar muchas horas encima de la bici sería recomendable llevar una buena badana, ropa cómoda y fresca, etc... pero también es cierto que no vamos a estar con los 40 grados manchegos, que vamos a estar entre 12 y 24 grados y esta temperatura es casi la ideal, ni frío ni calor. La temperatura más baja es para ir de manga larga y abrigados y la más alta se puede ir de manga corta sin pasar ni frío ni calor.


Respecto al tema del casco tenemos las mismas dudas, no sabemos si llevarlo o no, además en la caja de la bici no nos va a caber, y va a ser un poco ridículo llevar el casco ciclista puesto en el avión.

Cuando vayamos pedaleando la ropa de deporte no va a desentonar demasiado pero cuando paremos en un pueblo en donde la gente utiliza la bicicleta como medio de transporte y no solo como deporte vamos a hacer el ridículo, con un maillot de los 10.000 del Soplao, con una bici de doble suspensión y con un transportín, alforjas y timbre creo que no se corresponde mucho.

Yo he comprobado que puedo aguantar perfectamente un puñado de horas encima de la bicicleta con unos pantalones cortos o unos vaqueros si hace frío sin resentirme.

Muchas, muchas dudas y estas pruebas que vamos haciendo no terminan de despejarlas, seguimos con las mismas.