IX Vuelta nocturna al Anillo Verde de Madrid.

Hacía muchos meses, desde antes del verano, que le adelanté a mi padre que de vez en cuando organizaban vueltas nocturnas al Anillo Verde de Madrid y que en septiembre habría una vuelta nocturna de estas.

Hacía un par de semanas me recordó este detalle preguntándome por la fecha exacta. Para suerte para todos era después de la Titán de la Mancha y ya no tenía excusas de entrenamientos duros solo.

En caso contrario tendría que haber compaginado el fin de semana para poder estar en todos los sitios, durmiendo menos o montando en otros sitios para poder participar.

Participamos Belén, mi padre y yo en la IX Vuelta Nocturna al Anillo Verde de Madrid.

Participan, calculo, que más de 300 ciclistas de todos los niveles, medio y bajo, con muchos tipos de bicicleta que incluyen de carretera, paseo, montaña, dobles, incluso reclinadas, había algún niño y algún raro con altavoces, ropa rara, con un montón de cestas, transportines, etc...

A los pocos kilómetros de empezar el grupo se divide en "subgrupos" pero aun eso se van haciendo paradas para reagrupar e ir de una forma más o menos compacta. Dentro de lo complicado de la escasa organización, de no estar apuntado en ningún sitio, de no llevar dorsales, de ser gente de distintos niveles, no se fue mal del todo.

Es curiosa la reacción cuando a las 1:00 am de la madrugada nos cruzamos con ciclistas que sin conocer la convocatoria hacen la vuelta solos por la noche en sentido contrario, se quedaban mirando o preguntaban si estábamos organizados o como nos habíamos juntado tanta gente.

La vuelta no es exactamente el Anillo Verde porque se evitan algunos tramos, no se pasa por la zona de Aluche, ni por la zona de la Caja Mágica, ahí hay un recorte dejando los 65 km del anillo en los 55 que hicimos. Se evitan zonas conflictivas bien por el tráfico o bien por los barrios.

Mi padre iba más cansado que otras veces, en las subidas que tiene la ruta había que frenarse mucho. A mi me venía bien porqué me seguía doliendo mucho el tobillo del pié izquierdo. Creo que tengo una lesión que tardará en quitarse.

Salimos y terminamos en el Vicente Calderón y cuando terminamos pensábamos que éramos los últimos pero después de cargar las tres bicis en el coche todavía se veía llegar a más ciclistas haciendo la vuelta.

El ritmo fue lento, 4 horas para una vuelta recortada, algo cómodo para lo que es, gente iniciándose y con ganas de disfrutar de la noche, nosotros tuvimos suerte con el tiempo, pero mejor hacerla en pleno verano, en invierno con el frío de Madrid puede ser bastante dura.