Marcos iba super contento con su bici nueva, Paula desde los primeros 100 metros preguntaba cuando nos íbamos a dar la vuelta, volvió a decirme que aunque sabía que de pequeño no me gustaba hacer deporte y ahora de mayor si, a ella no la iba a pasar lo mismo, no la gustaba ni ahora ni cuando fuera mayor ni nunca jamás la iba a gustar montar en bici.
Recorrimos un total de 8km, los 4 de ida tardamos 1/2 hora, pero los 4 de vuelta para llegar cuanto antes a casa Paula empezó a correr más y en 15 minutos estábamos dejando las bicis en la terraza de la abuela. Menos mal que no ha podido ver la ocupación que la hemos hecho, en cuanto vuelva a casa tenemos que deshacernos de las bicis para que no la de un patatús.
Después de ver este carril bici no concibo como alguien puede vivir en Madrid y no tener una para darse un paseo como mínimo todos los fines de semana. 65 kilómetros rodeando Madrid con un carril bici dividido en zona para andar y dos para bici, una para cada sentido, impresionante y que envidia me ha dado que no haya algo así en Alcázar aunque lógicamente no sea de 65km pero si de 15 o 20 perfectamente para rodear el pueblo.
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